El 12 de septiembre, un grupo de estudiantes participamos de un festival social en el barrio de Catonas, acompañando la lucha que se lleva adelante por la educación pública.
Fue en el marco de un festival social organizado por diversos establecimientos educativos del barrio de Catonas. Allí donde la negligencia gubernamental ocasionó la muerte de Rubén y Sandra, el ISTLyR dijo presente.
Por un lado, aportamos un gran bolsón de verduras a la olla popular, producto de una colecta del estudiantado istlyrense; y, por otro, nos sumamos a la extensa propuesta de bandas en vivo del festival con nuestras danzas y juegos, celebrando una Cumbre de Juegos Callejeros (Cu. Ju. Ca).
Fue un día muy emocionante compartido junto a niñes, familias y toda la comunidad educativa del barrio, en el cual no sólo nos contaron, sino que pudimos presenciar la lucha histórica que están dando al unirse por primera vez todos los niveles educativos por un fin común.
Nos fuimos de allí con anécdotas, vínculos, múltiples propuestas y sobre todo con mucha felicidad, ya que como estudiantes del ISTLyR reconocemos la importancia de tejer redes de solidaridad y de fortalecernos en estos abrazos.
¿Cómo nace está acción colectiva?
En el encuentro en las calles del estudiantado istlyrense, en la marcha nacional por la educación, masticamos juntes la rabia que nos genera tanta hipocresía y maldad; y decidimos convocar a una Asamblea Urgente. En esta Asamblea, afirmándonos como un estudiantado activo y crítico de nuestra realidad, conformamos un grupo que, con la intención de correr el foco de nuestras intervenciones en la Capital, viajó a Moreno para poner el cuerpo, una vez más, en la lucha por la transformación social.
CEISTLyR