Entre el 2 de abril y el 14 de junio de 1982, la República Argentina se enfrentó
militarmente con Gran Bretaña por la soberanía de las islas Malvinas. Esta decisión fue
tomada por una dictadura cívico militar que venía ejerciendo el terrorismo de Estado
desde 1976 en nuestro país e intentaba ocultar la gravísima situación social, política y
económica a la que había conducido su gobierno, basado en el terrorismo de estado, la
exclusión social y las políticas neoliberales de mercado. Si bien la recuperación de las
islas fue considerada justa por una parte de la sociedad que salió a la calle a
manifestarse, los medios de comunicación utilizaron este fervor y le sumaron un tono
triunfalista, muy alejado de la realidad que sucedía día a día en el escenario del
conflicto. La derrota de Malvinas, junto a la resistencia de los organismos de derechos
humanos (Madres de Plaza de Mayo, entre otros) y las organizaciones de
trabajadores/as fueron los acontecimientos que precipitaron la salida del poder de los
dictadores y abrieron las puertas a la transición democrática.
Malvinas no es sólo las memorias de la guerra, sino también la historia y el presente del
reclamo diplomático más largo e importante que ha sostenido –y sostiene– el Estado
argentino en su historia. Este ejercicio de soberanía está relacionado con el territorio,
integrado por raíces históricas, culturales, políticas y económicas, y con los recursos
naturales. Desde la apropiación de los ingleses la Argentina ha reclamado de forma
sostenida sus derechos soberanos sobre las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich
del Sur y los espacios marítimos circundantes a través de acciones diplomáticas
permanentes y obtuvo el pronunciamiento favorable de organismos internacionales,
tales como la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y el apoyo histórico de
Latinoamérica.
Por ello, en esta fecha los argentinos conmemoramos el Día del Veterano y de los
Caídos en la guerra de Malvinas. Este homenaje es el resultado de una ley del
Congreso nacional en el año 2000, y establecido para todas las instituciones educativas
como una oportunidad para recordar nuestra historia y para rendir homenaje a veteranas
y veteranos, familiares y caídos en nuestras islas.
Roberto Elisalde
Docente del ISTLyR
